Previsiones e institucionalidad para el sector forestal misionero
Misiones se caracteriza por sus bosques nativos y cultivados, y la producción de yerba mate, junto a las industrias asociadas a esas actividades.
Se requiere visión estratégica para que esas actividades emblemáticas se sigan desarrollando y promuevan el progreso económico y social.
Entre las actividades productivas primarias, los bosques cultivados y la yerba mate ocupan la mayor cantidad de superficie en la provincia. Como suele ocurrir cíclicamente, los precios de la madera o de la yerba producen sobreoferta o faltantes.
Asistimos a un período de buen precio de la yerba, que provoca una oleada de plantaciones, que en pocos años inexorablemente producirá sobreoferta y baja de precios.
En tanto, en el sector forestal ocurre lo contrario, la baja rentabilidad de los bosques cultivados plantados en exceso en la primera década de este siglo, está llevando a la disminución preocupante de la superficie cultivada, que tendrá como consecuencia el déficit de materia prima en menos de 10 años, de continuar la muy buena actividad foresto industrial desde mediados de 2020 hasta ahora.
El INYM reaccionó y puso cupos de plantación, previendo la sobreoferta de yerba. El sector forestal no reaccionó.
Quizá por la falta de una actualización del Inventario Provincial que ponga blanco sobre negro el patrimonio existente y poder hacer previsiones en el tiempo, y quizá también porque la industria forestal aprovecha el sobrante de madera que hay actualmente, que favorece a su rentabilidad.
El cultivo forestal es plurianual, requiere hacer proyecciones y tomar previsiones para evitar sobresaltos en 10, 15 o 20 años. Lo que se haga o no ahora tendrá consecuencias importantes.
Si se mantiene el ritmo de cosecha forestal actual, en 2024 podría consumirse el sobre-stock de madera, comenzar un período de equilibrio, y luego problemas de escases de materia prima.
Según los pocos datos disponibles, el último año que se plantó suficiente para mantener la oferta de materia prima equilibrada con el consumo fue 2012, luego declinando hasta aproximadamente la mitad de lo requerido mirando 15 o 20 años para adelante.
Estos recursos estratégicos para el desarrollo provincial deben ser monitoreados periódicamente. El INYM hizo el relevamiento, que llevó a establecer cupos a la plantación de yerba.
Hay formas de financiar un Inventario Forestal con los recursos aportados por el propio sector a través de la Tasa de Servicios Forestales, establecida en 2006 a través de la Ley XVI – Nº 87, que en su Artículo 1° prevé su utilización para inventario forestal de bosques cultivados.
La des-financiación nacional de los fondos de la Ley 25.080 para plantaciones forestales también hace lo suyo para la merma de superficies que se observa, que afecta mayormente a los pequeños productores que tienen forestaciones en sus propiedades.
Por último, cabe mencionar que Misiones, la provincia más forestal del país, no cuenta con una estructura institucional jerarquizada y unificada acorde a la importancia económica, social y fiscal que tiene el sector, para gestionar los bosques cultivados y los bosques nativos bajo planes de Manejo Forestal y lo demás concerniente a la evolución sectorial, con visión estratégica.
A esta altura de los tiempos se requiere la creación de un Ministerio de Desarrollo Forestal, a cargo de un equipo político – técnico idóneo, sin agregar más burocracia, y simplemente reasignando funcionarios de la planta estatal existente.
FUENTE: Argentina Forestal
