Reflexiones

La fe que traspasa las adversidades

1º de Samuel 14:6-8

6 Dijo, pues, Jonatán a su paje de armas: Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá haga algo Jehová por nosotros, pues no es difícil para Jehová salvar con muchos o con pocos.7 Y su paje de armas le respondió: Haz todo lo que tienes en tu corazón; ve, pues aquí estoy contigo a tu voluntad.8 Dijo entonces Jonatán: Vamos a pasar a esos hombres, y nos mostraremos a ellos.

• El plan de Jonatán era atacar al destacamento de los filisteos, no con su ejército sino sólo él y su siervo.

• Era un plan descabellado y suicida.

• No lo hizo por “temerario”, creyéndose invencible, sino porque confiaba en Dios, para quien nada es imposible.

Si sólo ellos dos tenían fe, entonces sólo ellos debían ir.

Desarrollo:

I. La fe abre las puertas a la victoria, pero la duda a la derrota.

Dijo, pues, Jonatán a su paje de armas: Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá haga algo Jehová por nosotros, pues no es difícil para Jehová salvar con muchos o con pocos.

A. Es necesario creerle a Dios.

B. Es necesario influenciar con la fe.

C. Es necesario conquistar por la fe.

 

II. La verdadera fe en Dios no es creer que Él hará cualquier cosa que “uno quiera”, sino que Él hará lo que ha dicho.

A. ese momento, Jonatán no había recibido revelación directa de Dios; lo único que sabía era que Dios quería que echaran fuera a los en enemigos.

B. Para entonces, aún no sabía si debía llevar a cabo el plan temerario.

C. Por esa razón buscó que Dios le confirmara si debía seguir adelante con el plan o no, y pidió una señal.

 

III. Dios no quiere que seamos simples “espectadores”, sino que tomemos un rol activo en la conquista de lo que Dios tiene para nosotros.

A Por esa razón buscó que Dios le confirmara si debía seguir adelante con el plan o no, y pidió una señal.

B. Cada uno debe echar fuera al “enemigo de su vida” (el pecado y líneas de iniquidad).

CONCLUSIÓN

Nosotros debemos estar dispuestos y hacer nuestra parte, y Dios hará el resto. Allí veremos los milagros.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *