Gestión integrada: Ecología trabaja con otras instituciones para el cuidado de monte, vertientes y suelo

Cuidar vertientes, trabajar para optimizar recursos, aprovechar el agua de lluvia y buscar una gestión integrada de la riqueza natural son objetivos sobre los que viene trabajando el Ministerio de Ecología en articulación con otras instituciones, municipales, provinciales y nacionales. La tarea tiene aún más importancia tras el déficit de precipitaciones que se dio en distintos meses de 2021 y 2022.

“La gestión integrada de los recursos naturales tiene que ver con una mirada de cuenca. La cuenca hidrográfica es el territorio demarcado naturalmente en la provincia donde convivimos los humanos, el ambiente y la biodiversidad. En ese espacio también se desarrolla la actividad productiva”, indicó el licenciado Oscar Paniagua, de la cartera ecológica provincial y coordinador del Sitio Piloto Cuenca del Arroyo Garupá, uno de los que son monitoreados por el Observatorio Nacional de la Degradación de Tierras y Desertificación.

 Añadió que se busca “el enfoque integral e integrado de los recursos naturales de una manera sostenible. Tiene que ver con seguir produciendo, es decir continuar activos económicamente, pero cuidando lo más importante que es la naturaleza”.

“El elemento principal es el monte o árbol, que terminan en definitiva protegiendo al suelo, que es nuestro sostén productivo y al agua, que es el líquido vital para nosotros y para la producción”, indicó el técnico.

Señaló que “el árbol y el monte, además de ofrecernos la infiltración de agua, a través de cuyo proceso se originan las vertientes, brinda otro servicio ecosistémico que es la producción de oxígeno. Por ello en nuestra chacra el elemento fundamental es el monte, el árbol y en especial en la zona de arroyos el bosque en galería”.

Paniagua recordó que “desde 2008 el Ministerio de Ecología viene trabajando en un proyecto de gestión integrada de cuencas articulando con diferentes instituciones públicas y privadas”.

En este marco, precisó, “nos encontramos trabajando en el Sitio Piloto de la Cuenca del arroyo Garupá. Entre todos los actores tratamos de llevar adelante esta nueva mirada que tiene que ver con lo productivo y con un manejo sostenible de los recursos naturales. Si no hay suelo fértil ni agua no se puede producir”.

“Primero y principal trabajamos con los productores y demás actores locales, como municipios, escuelas, cooperativas y asociaciones de productores. Apuntamos con capacitaciones al trazado de curvas de nivel, la protección de vertientes y el manejo de caminos rurales. El año pasado sumamos la prevención de incendios rurales y forestales”, detalló.

Con respecto a la protección de vertientes, Paniagua destacó “el fuerte apoyo del INTA, sobre todo en lo que tiene que ver con la identificación y revalorización de esas fuentes de agua, muchas de las cuales habían sido descuidadas en las colonias”.

“Buscamos identificar la vertiente, mantener el monte nativo y tratar de protegerla a través de una obra simple, que consiste en ponerle brocal y tapa y luego unos caños. De esa manera, provee a la familia de agua segura. Si tienen animales en el predio, estos no van a pisotear la fuente ni va a beber de ahí. Tampoco se va a contaminar con algún arrastre de suelo. El líquido que se obtiene servirá entonces para consumo humano, para los animales y para la producción”, aseguró.

Según el técnico, “tras dos años de sequía, el valor del agua volvió a ubicarse al tope de la agenda. Cuando hablamos de protección, la gente se involucra mucho. Es que sin recursos naturales la vida se hace imposible”.

 

Fuentes: EnfoqueMisiones

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *