HECHO EN MISIONES DIJO PRESENTE EN LA 10° EDICIÓN DE LA FAM EN PUERTO IGUAZÚ
A través de la Subsecretaría de Promoción y Coordinación de la Economía Social, el
ministerio de Desarrollo Social, la Mujer y la Juventud, acompañó a productoras y
productores de la marca Hecho en Misiones, que estuvieron presente en la nueva
edición de la Feria de Artesanías del Mercosur que se realizó en Puerto Iguazú.
El evento duró cuatro días y recibió a unos 35.000 visitantes, que visitaron a los más
de 200 artesanos que presentaron sus productos en los salones del Centro de
Eventos y Convenciones del Iguazú y entre los cuales participó la marca Hecho en
Misiones. De esta manera, Teresa Nonenmacher y Matias Alejandro Moran del
emprendimiento Miel la Justina; María Isabel Glinka y José Luis Gómez del
emprendimiento GyG envasados; Osvaldo Ramírez y Nancy Wicher de Biscochipa y la
Cooperativa Ruiz de Montoya Lda. con sus productos Tucanguá fueron los
representantes de la marca misionera.
El subsecretario de Promoción y Coordinación de la Economía Social destacó la
participación tanto de las familias emprendedoras que llevaron sus producciones
hasta la ciudad de las Cataratas y agradeció a la organización por tenerlos presentes
para esta nueva edición. “Cada producto es único y tiene una historia que es el valor
agregado de todo ello; a todo esto, le sumamos la gran vidriera que es la FAM para promocionar y comercializar productos, para intercambiar experiencias y para crear rondas de negocios en pos de expandir los mercados”, explicó y advirtió que se han generado importantes ventas y acuerdos en la promoción y comercialización.
También se realizó lunch con premiación para los artesanos donde un distinguido grupo de jurados eligió como ganador al orfebre Lucio López y en segundo lugar a la ceramista Lujan Olivera. Los ganadores recibieron, además, un premio en efectivo como incentivo para seguir trabajando en perfeccionarse.
Alrededor de 35.000 personas visitaron los stands de la feria superando toda expectativa, generando un beneficio económico enorme para la ciudad y los artesanos, que reciben un justo reconocimiento por su esfuerzo en mantener viva la cultura para las próximas generaciones.