Hacer La Diferencia Vale La Pena: Andresito Vivió A Pleno La Edición 26 De La Maratón Radial
La iniciativa solidaria es impulsada por el Instituto de Modalidad especial Dr. René Favaloro. Participaciones artísticas y de trabajos, juego y la tradicional bicicleteada dibujaron una sonrisa en los presentes.
La plaza central de Andresito fue el escenario donde el sábado por la noche y el domingo por la tarde se llevó a cabo la edición número 26 de esta actividad bajo el lema “No me trates con diferencia, mejor haz la diferencia”.
El objetivo es “dar a conocer el trabajo que realizamos y presentar las producciones de cada taller”, sostuvo Liliana Castillo, Directora del Instituto. Agregó que también es una forma de recaudar fondos, ya que si bien los sueldos están cubiertos y recibimos mucha ayuda del Estado, hay costos diarios que cubrir ya que la atención de las personas en dicho instituto “no tiene costo alguno para las familias”.
En el encuentro se ofrecían pizzetas, chipitas, planteras, trabajos en tela y madera, entre otros productos de los diferentes talleres del Instituto y elaborados por los chicos, explicó Castillo.
En la noche del sábado se realizó el festival artístico, con participaciones de los miembros del Instituto, así como artistas locales. Ya en la tarde del domingo se desarrolló la bicicleteada, que consiste en un recorrido de ida y vuelta desde la plaza y hasta la rotonda de acceso al pueblo. A cada participante se le da un número con el que participa del sorteo de una bicicleta y un kit deportivo.
También se realizó la plantación de un árbol, emblemático aporte al ambiente. En esta ocasión se plantaron tres, dos de los cuales fueron por los años de pandemia, en los que la actividad se llevó a cabo en modalidad televisiva y radial, exclusivamente.
Por último, se efectuó el sorteo del bono colaboración, que incluyó un total de 52 premios, dentro de los cuales figuraron electrodomésticos y órdenes de compra o servicios.
Un poco de historia
El nombre “Maratón radial” se debe a que los primeros encuentros eran promovidos y transmitidos por las radios locales como una verdadera maratón de 24 horas, que iniciaba a las 18 del sábado y terminaba a las 18 del domingo. Si bien ya no posee esa modalidad, sí conserva su esencia humanitaria.
Todo inició en 1996 gracias a un grupo de vecinos, que tenían en común algún familiar con discapacidad y encararon el desafío de empezar con una escuela de modalidad especial. “A puro pulmón” como cuenta Yeni Hutwert, -representante legal desde el inicio – “había que conseguir fondos: ladrillo a ladrillo” agregó.
“Un día que el gobernador visitaba Andresito el intendente nos dijo que reunamos en su oficina a todas las familias que tuvieran a alguien con discapacidad a fin de dar a conocer la problemática” recordó Hutwert. “Ahí, con una firma empezó la oficialización de esta propuesta, para atender a los chicos”, manifestó.
Yeni –como le dicen todos-, consultada por qué colabora con el Instituto dijo: “Es una pasión. Ver los avances -por pequeños que sean- de quienes tienen discapacidad es realmente una alegría”.
Este impulso sigue sumando gente. Desde la actual presidente, María Lurdes de Souza de Da Rosa, que es socia fundadora, hasta el aporte de otras entidades, como la Cooperativa Yerbatera, cuyos miembros también se asociaron al organismo y aportan una cuota social.
DATOS: Las actividades se iniciaron en 1996, sin espacio propio ni personal subvencionado. En el 97 se redactó el Estatuto, que continúa vigente. En el 99 se logró la personería jurídica, conformándose la Asociación Civil de Ayuda al Discapacitado de Almirante Brown –nombre por ese entonces del municipio-. Recién en el año 2010 el Servicio Provincial de Enseñanza Privada de Misiones (SPEPM) reconoce al Instituto de Modalidad Especial René Favaloro cód. 0707.
Actualidad: La escuela cuenta con 29 cargos subvencionados y atiende a más de 60 personas con discapacidad.
El predio cuenta con 9 salones en los que se desarrollan diferentes actividades según la discapacidad de cada persona.
Estimulación temprana, es el espacio que recibe a los más pequeñitos, desde los 3 meses de vida y hasta que los profesionales lo estimen necesario. “Tenemos a Yuli, que empezó con 9 meses y ahora está con 10 años. Ella realiza paralelamente estímulo pedagógico y motor”, contó Claudia Kurrle, kinesióloga responsable de esta área. “Lo que hacemos es enseñar a las familias las diferentes formas de estimular el desarrollo motriz de los niños, ya que están solo 40 minutos con nosotros”, añadió.
Luego hay tres etapas más. La última consiste en capacitar en oficios a través de diferentes talleres, aun cuando se siga reforzando aspectos de conocimiento pedagógico.
Cuentan con talleres de carpintería, floricultura y huerta. Además de formación profesional en panadería, donde reciben certificado de Auxiliar de Cocina, avalado por SPEPM.
“Pituca”, es el nombre de una yegua muy querida en el Instituto y que forma parte del espacio de equinoterapia, propuesta aplaudida por todos los que pueden interactuar con ella.
Prensa Municipal
Fuentes: Municipalidad de Andresito.