Leonardo Morzan: «Misiones está bien posicionada en la escala de producción de cannabis medicinal en el país»

Uno de los proyectos más importantes que tiene en marcha para 2023 la Biofábrica Misiones es ampliar la producción de cannabis medicinal. Ya se está trabajando en un predio cedido por el INTA para este fin. Se trata de siete hectáreas que le darán un mayor volumen al proceso de extracción de aceite de uso terapéutico.

En los próximos días, cumplirá un año la gestión del ingeniero agrónomo Leonardo Morzan al frente de la empresa. «Ha sido un lindo desafío. Me encontré con un equipo de trabajo muy consolidado. Se mantuvo lo que estaba haciendo y se sumaron más iniciativas. Estamos muy contentos por los logros y agradezco al plantel», consideró.

En una charla conENFOQUEMisiones, anticipó que «se va a continuar trabajando fuerte en la línea que tiene que ver con cannabis para la producción de aceite medicinal, mediante la alianza estratégica que tenemos con MisioPharma. Nosotros le proveemos los cogollos secos y ellos en el laboratorio hacen la extracción del aceite».

«Tenemos un convenio de cooperación técnica con el INTA en el cual esa institución aporta el predio pegado a la Biofábrica que tiene siete hectáreas. La idea es escalar allí la producción de cannabis, al aire libre. Esto aumentará la escala del proyecto, pues tendremos más producción de materia prima para el abastecimiento del laboratorio», explicó Morzan.

Reveló que «se está trabajando en el predio. Hay que hacer una serie de infraestructuras, como la instalación del sistema de riego y levantar el cerco perimetral, el movimiento de suelos. Dentro de un mes queremos comenzar a implantar allí. En septiembre esperamos tener las siete hectáreas productivas».

Señaló que «en el invierno no se puede plantar. Cannabis es una especie a la que le afecta la helada. Nuestra última fecha de siembra sería mediados de marzo o principios de abril. Lo que sí seguimos es la producción en los invernaderos, donde la producción es todo el año. Allí hay ejemplares en estado vegetativo y otros en floración».

El presidente de la Biofábrica sostuvo que la empresa «está bien posicionada en la escala de producción de cannabis medicinal. Se ubica segunda a nivel país detrás de Jujuy. La apuesta del Gobierno misionero es muy importante».

Por otra parte, Morzan también enumeró las demás líneas de trabajo. «Vamos a seguir también con la producción de bioinsumos porque el año pasado Senasa nos aprobó la comercialización de uno hecho a base de Trichoderma Asperellum, un microorganismo que actúa como fertilizante y fungicida biológico, favoreciendo el desarrollo de las plantas».

Las cepas del hongo que utiliza son nativas misioneras, por lo que están adaptadas al clima y suelo de la región. Este fertilizante biológico es recomendado para cultivos hortícolas, tabaco y yerba mate, pero también puede ser aplicado a otras plantaciones.

Mihoba es el primer producto de este tipo registrado por la provincia. Y actualmente hay otros hongos en etapa de investigación para fines similares.

«Otra actividad de la Biofábrica es la producción de vitroplantas, a través de la micropropagación. Se saca allí caña de azúcar, banano, además se investiga sobre eucaliptos y cannabis. Llevan su tiempo estos procesos, porque hay que validar los métodos para luego aprobar los protocolos», especificó.

Agregó que también continúan trabajando con los plantines a través de la macropropagación, esto es la tarea en los viveros: «Producimos nativas, como lapacho amarillo, caña fístula, timbó y anchico colorado. Son para reforestar el monte nativo y el manejo agroecológico de la yerba mate. Además plantines de hortícolas, de frutos y de hojas. También se está validando el protocolo de frutilla».

En la Biofábrica la investigación y la innovación son una constante. «Articulando con el Ministerio del Agro, por ejemplo, se implementa un ensayo de banano y mamón con una técnica de propagación que se llama embriogénesis somática, a través de regeneración de brotes en el laboratorio. Brotes in vitro, con plantas de genotipos de elite. Se busca aumentar la eficiencia de los protocolos para esas especies. Esta técnica nos permite una mayor cantidad de plantines en menor tiempo», detalló Morzan.

Los ejemplares de banano, mandioca, mamón y caña de azúcar se quedan en la provincia, porque son proveídos a organismos como los ministros de Agricultura Familia y el Agro y el IFAI para que lleguen a los productores. «El algarrobo se trabaja con Córdoba y banano con Salta y Formosa», añadió.

Por último, mencionó la fabricación de laboratorios móviles. «Ahora se terminó uno para el Ministerio de Desarrollo Agrario de Buenos Aires. Y van demandar dos más. Ellos necesitaban capacitación sobre transferencia de tecnología. Lo que se hace en estos casos es hacer el laboratorio y venderlo con los protocolos de micropropagación», completó.

Fuentes: Enfoque Misiones.