Parque Olero: tecnología, infraestructura y dignidad laboral
Funciona desde 2020 e implicó una inversión provincial de 60 millones de pesos. En el lugar trabajan 23 familias. Cuentan con sala de ventas, laboratorio, comedor, vestuarios y hasta un museo. Producen 25 mil ladrillos semanales que venden en toda la provincia y la región.
La olería y el oficio olero implica un trabajo artesanal y de mucho esfuerzo que se mantuvo sin demasiados cambios a lo largo del tiempo. En las olerías el paso a paso es similar, metódico y sacrificado. Sin embargo, en el Parque Olero de Posadas más de 20 familias producen ladrillos en condiciones adecuadas. Con tecnología e infraestructura le dan calidad a los productos y, lo más importante, dignidad laboral a los trabajadores.
El primer paso para hacer un ladrillo es obtener tierra útil, luego se prepara una mezcla de tierra negra con barro ñaú y aserrín. Esa masa se puede hacer con un malacate que tracciona a fuerza y se usa -si se tiene- un caballo. En el Parque Olero las mezcladoras son eléctricas y de industria local.
El siguiente paso es acarrear la preparación, por lo general con carretillas de madera, cuyo peso ronda los 100 kilos y requiere un esfuerzo físico considerable. La mezcla tiene que estar libre de piedras, ramas o cualquier material que pueda alterar la forma de los ladrillos. Después viene la limpieza de cancha, donde se utiliza una especie de escoba, también de madera, a la que se la denomina guapo porque -según explicaron- “hay que ser muy guapo para hacer esa tarea”. Por último queda extraer la masa y colocarla en moldes, armar los ladrillos, orearlos y hornearlos. Si llueve y se moja la producción el proceso se reinicia.
Decisión política y trabajo en equipo
El objetivo principal del Parque Olero fue dignificar el trabajo y pasarlo a un proceso industrial. “El espacio nació a fines del 2020 con una inversión provincial de aproximadamente 60 millones de pesos“, contó el presidente del Parque Industrial y de la Innovación, Christian Piatti.
Después, en coordinación con el Ministerio de Acción Cooperativa y la Cooperativa Ladrilleros Unidos Nuestra Señora de Itatí, se puso en marcha el espacio. “La respuesta fue muy buena. Se adaptaron rápido y se sigue sumando gente y proyectos. Lo mejor es que venden toda la producción“, destacó Piatti.
Seguridad laboral y familiar
Según explicó la presidenta de la cooperativa, Alba García, cuando comenzaron a usar las instalaciones eran cuatro o cinco familias. Hoy son más de 20. “Para el que trabaja en la olería sabe lo que significa el oficio: trabajar bajo del sol, lluvia o frío. Te embarras y dependes del clima“, apuntó. Por ello, la infraestructura del Parque les significó un cambio muy grande. Es que tienen la tranquilidad de que el trabajo y el esfuerzo no se pierden con algún chaparrón. Sumado a mejoraron los ingresos económicos para sus familias.
Con respecto a las ventas, aseguraron que son muy buenas y que se vende todo lo que se produce. “Muchos vecinos que nos compran nos dicen que a ellos también los ayudamos porque al ser una cooperativa tenemos mejor precio“, explico García.
En el Parque Olero se producen hasta mil ladrillos por hora y hasta 25 mil ladrillos por semana. A $80 la unidad, las ventas van en aumento con clientes que llegan de toda la tierra colorada y la región. “Tenemos clientes de todos los municipios y también de otras provincias, incluso tres clientes fijos que vienen de Corrientes todas las semanas a buscar ladrillos“, aseguró.
El trabajo cooperativo se da entre 23 familias que rotan según la demanda. A eso se suman las tareas de mantenimiento, limpieza del predio, las ventas y un sereno. “Trabajamos en conjunto y en familia. Es una cadena y todo depende de los que estamos produciendo acá“, contó García.
Infraestructura de calidad y dignidad laboral
García nació en una familia olera, por lo que conoce el oficio y el sacrificio desde su niñez. “Mi papá tiene 75 años y sigue haciendo ladrillos, con él aprendí el trabajo. Antes tenía la olería en casa, pero no pudimos porque la tierra no era buena. Después surgió la cooperativa y vinimos . Acá tenemos baños, vestuarios, comedor y todo lo que antes no teníamos“, relató.
Inclusive, los trabajadores celebran la posibilidad de bañarse antes de retornar a sus casas. “Antes teníamos que viajar en colectivo embarrados y sucios“, comentaron.
Otra ventaja es que el trabajo rinde, no se demora la producción y no se hecha a perder ni el esfuerzo ni el tiempo. También mejoró el ingreso económico de los trabajadores que pueden planificar a futuro y llevar seguridad a sus familias. “En la producción artesanal sos esclavo del clima. No existen sábados ni domingos, porque dependes del pronóstico para trabajar“, explicó García.
Recordó que cuando llovía de madrugada “teníamos que salir corriendo a tapar la producción o vas a pérdida“. En cambio, ahora a “todos nos mejoró la economía porque acá aunque llueva podes trabajar, la producción no para“, subrayó.
Historia puesta en valor
Entre las instalaciones del Parque Olero, precisamente en el ingreso, se construyó una sala de venta donde reciben a los clientes y realizan las transacciones. En ese espacio, se encuentra también el museo, que tiene como fin dar a conocer la historia de la olería en Misiones. De esta manera, buscan sensibilizar y mostrar el trabajo artesanal.
Además, está en proceso de construcción un laboratorio para analizar la composición de la tierra y el barro para estar seguros de que se elabora con buena materia prima. Así se garantiza la calidad del producto.
Por último, Piatti contó que continúan los planes para sumar maquinaria e infraestructura para responder al crecimiento de la cooperativa. “Restan sumar algunas máquinas para acelerar el proceso de oreo que aumentarían cinco veces la producción“, explicó.
El Gobierno de Misiones, a través del trabajo en equipo de las diferentes áreas, impulsa a los trabajadores a profesionalizarse y capacitarse continuamente. La meta es que se desarrollen las industrias provinciales. A la vez, generar crecimiento económico, seguridad familiar y una mejor calidad de vida para las familias misioneras. También se contempla el cuidado del ambiente y la preservación de los recursos naturales.
Fuentes: Canal12Misiones.