Mitos, famosos y salud: Por qué 420 es el código para hablar de cannabis
Qué significa 420 en la jerga cannábica. Cuál es su origen. Por qué el mundo celebra hoy el día de la marihuana. Símbolo de una generación y un consumo, el código se popularizó a través del trap, las redes sociales y la cumbia 420.
Por Florencia Bueno
La expresión 420 se utiliza en todo el mundo. Sintetiza la cultura cannábica, que en los últimos años ganó protagonismo.
Las celebraciones del 4/20 o 20 de abril se hicieron populares en todo el mundo. Hay distintas versiones sobre su origen. La más aceptada parece ser la historia de un grupo de amigos, que en 1971 emprendió la búsqueda de un tesoro.
Four twenty: un día y una hora
El grupo de estudiantes de la escuela secundaria de San Rafael, en el norte de California, se hacía llamar Los Waldos. En el otoño de ese año, se encontraron un mapa dibujado a mano que ubicaba un cultivo de marihuana en Point Reyes, al noroeste de San Francisco.
Los Waldos elaboraron un plan que los llevara hasta la plantación de cannabis. El inicio de la travesía se pactó para las 4:20 de la tarde. Pese a que los adolescentes no llegaron a encontrar el lugar exacto que ilustraba el mapa, la expresión 420 pasó a utilizarse como código. En principio, para hablar de la marihuana y luego tomó impulso su uso, a nivel mundial, para reclamar la despenalización de su consumo.
Posiblemente el movimiento hippie, que tuvo lugar en los Estados Unidos entre finales de la década de los 60s y principio de los 70s haya sido un escenario propicio para inspirar la fecha. En esta época predominaban festivales de rock, músicos y bandas como The Beatles, The Rolling Stones, Jimi Hendrix y Janis Joplin, usuarios declarados de la marihuana. Por entonces también el consumo de esta hierba se incrementó significativamente y comenzó a afianzarse la cultura cannábica.
Versiones que fueron desmentidas
Otras explicaciones acerca del origen del código afirman que deviene de las leyes criminales en California para castigar el uso o la distribución de la marihuana. Pero, el código 420 del Estado refiere a la obstrucción de la entrada en espacio público.
Otra teoría indica que es el número del radioteléfono de la policía. Ningún Estado del país norteamericano tiene el código 420 para realizar denuncias.
Otro mito sobre el origen del código hace un guiño con la canción de Bob Dylan Rainy Day Women #12 & 35. Su letra dice “todo el mundo debería drogarse”. Si se multiplica 12 por 35 el resultado da 420. Parece algo forzado y Dylan nunca confirmó ningún vínculo entre la canción y la fecha.
Por lo que la versión, aceptada y confirmada con los años es la de Los Waldos. Quienes dieron pruebas mediante cartas, objetos y encuentros a las 4:20 de la tarde, de que ellos fueron los inventores.
4-20 a las 4:20
El código 420 en 1971 les permitió a estos jóvenes hablar en secreto acerca de la práctica. “Descubrimos que podíamos hablar de fumar marihuana sin que nuestros padres se dieran cuenta utilizando el código 420”, confesó Steve Capper, uno de los integrantes del grupo, a la revista High Times en diciembre de 1998. Cuatro veinte fue una convocatoria a fumar cannabis bajo la estatua de Louis Pasteur, el científico pionero de la pasteurización. Y a divertirse en la búsqueda de un tesoro, la plantación que nunca encontraron.
La expresión 420 extendió su popularidad de a poco. Amigos de amigos incorporaron el código. Y según cuenta el relato de Los Waldos –quienes hoy ya no son jóvenes-, cuando 420 llegó a la banda de rock Grateful Dead, tuvo un antes y un después. Los fanáticos del grupo musical lo hicieron propio; más tarde llegó al editor de la revista High Times, especializada en marihuana, que empezó a usarlo. Desde entonces, es frecuente la vinculación entre la cifra y el cannabis.
Hoy es un símbolo que aparece en remeras, canciones, biografías de Tinder y otras redes sociales, y a lo largo de toda la cultura pop.
Cultura Cannábica a través del tiempo
Actualmente la cifra 420 poco tiene de misterio. La cultura cannábica ganó lugar y se popularizó el uso de diversos productos derivados de la planta. Desde el recreativo hasta el medicinal y terapéutico, debido a sus innumerables propiedades.
Registros históricos remontan el uso del cannabis para inducir experiencias espirituales desde los años a.C. En el Subcontinente indio en el período védico, en la antigua China, los pueblos germánicos, los celtas, el mundo islámico, la antigua Asia central y África. En tiempos modernos, el uso espiritual de la droga se asocia también con el movimiento rastafari originado en Jamaica. Varias subculturas occidentales han tenido el consumo de marihuana como una característica de su idiosincrasia. Los hippies, los beatniks, los hipsters, los ravers y la cultura hip hop.
En la actualidad, la cultura cannábica tiene un lenguaje, humor, música, literatura y arte propio. Incluso el acto de fumar un porro desarrolló su simbolismo, más allá de su ilegalidad o penalización. El estereotipo negativo de la planta y los consumidores es una idea relativamente moderna. El cannabis se consume en diversas formas hace casi 5.000 años.
Argentina: Trap, Regaetón y Cumbia 420 pá lo negro
La cultura cannábica en Argentina se popularizó en los últimos diez años. A través del trap, el regaetón, la cumbia y otras expresiones artísticas, son los jóvenes quienes más utilizan el término cuatro veinte. El 20 de abril de cada año el #420 inunda las redes sociales. La fecha se instaló como el día mundial de la marihuana.
Después de haber ganado la Batalla de Gallos Internacional de Red Bull en 2018, Wos lanzó su primer disco como solista llamado Caravana. El primer corte fue Canguro que en la actualidad acumula más de 170 millones de reproducciones en YouTube.
En la letra del rapero aparece la expresión “420”. Un código conocido y antiguo en el ambiente de los freestylers de las plazas, que tras la canción se viralizó entre generaciones -incluso- anteriores a la de Wosito (25 años).
El productor musical Bizarrap, otro exponente de la escena trap surgido de las batallas en las plazas, también utiliza la expresión.
Tus besos quiero tatuarme/ Y tú queriéndome hasta odiarme/ La mejor mota se fuma mi flota/ Tiro 4:20, Homegrown trae la pelota/ Controla el esférico/ Y esa bitch loca por el perico.
“Cumbia 420 es cumbia, reggaetón y marihuana”
La Cumbia 420, se volvió un fenómeno musical con alma de regaetón y cumbia. Empezó a escucharse en 2014, pero a estar en boca de todos de la mano de L-Gante y El Noba, quien falleció en un accidente de moto en 2022.
El artista DT.Bilardo, productor de L-Gante, definió a la Cumbia 420 como “la nueva cumbia y se caracteriza por el ritmo para atrás. Es la fusión entre distintos estilos de la calle en un solo género en donde cada uno pone su esencia” dijo a Página 12.
“Es un ritmo cumbiero actual, es mi género favorito, el que represento y al cual quiero que nunca se le pierda la esencia de la cumbia, del barrio y que la gente se sienta identificada. Adornamos el trap con cumbia, con drill francés y con folclore”, precisó L-Gante.
“Cumbia 420 es cumbia, reggaetón y marihuana”, aseguró DT.Bilardo. Mientras que L-Gante, quien en sus canciones repite la frase ‘Cumbia 420 pa’ lo’ negro’, agrega que “al estar fumados tomamos todo con más relajo. Con la mente y la inspiración sin límites, nos habilita una visión a largo plazo y a futuro”.
Si bien continúa siendo cuestionado y penalizado el consumo de cannabis. Los diferentes estudios sobre la planta, la socialización de saberes y sus propiedades curativas posibilitan hoy al menos hablar de la hierba.
OMS y ley de cannabis medicinal
La organización mundial de la salud declaró que su uso medicinal no representa riesgos para la salud. Que el CBD sirve como paliativo para enfermedades crónicas y para pacientes con epilepsia, y no genera adicciones. El Cannabidiol reduce el dolor y la inflamación, controla las convulsiones epilépticas y sirve para el tratamiento de enfermedades mentales o adicciones.
El consumo recreativo, continuo y descontrolado puede derivar en un consumo problemático. Producir alteración de la conciencia y deteriorar la percepción, reducir la coordinación, y en algunos casos generar ansiedad y pánico. Por lo que se recomienda su uso adulto, es decir responsable.