Crece demanda en Brasil de trabajadores argentinos para levantar la cosecha anual
Se trasladan unos 500 kilómetros desde Misiones hasta Río Grande do Sul para cosechar desde uvas, manzanas, duraznos, hacer carbón, ladrillos o desempeñarse en industrias.
La constante devaluación del peso argentino ante monedas como el real, representa un interesante imán para los argentinos de a hacer changas temporales en Brasil. Por eso, trabajadores golondrina de Misiones y otras zonas migran por estos días para aprovechar la diferencia cambiaria entre el real y el peso argentino. Les ofrecen un básico mensual de 1.630 reales (al cambio actual que en la frontera llega a $235, por lo que llegan a cobrar unos $383.050) con comida, alojamiento y pasaje por cuenta de la empresa. Destacan que algunos logran ganar hasta 3.500 reales, es decir unos 800.000 pesos.
Si bien el trabajo golondrina -conocido así por buscar changas durante el año en diversas provincias o Brasil- es una práctica habitual en esta época del año, siempre fueron casos aislados y no una importante fuga de trabajadores rurales temporarios como está sucediendo ahora. De esta manera, hacer changas en Brasil se intensificó esta semana; son los que van por unos meses para hacer cosechas y luego volver.
En estos días, se notó una altísima demanda de trámites para ir a Brasil, además de conocerse cómo algunos empresarios promueven los beneficios para conseguir mano de obra argentina. Comenzó con la cosecha de manzana y de durazno, ahora se fue multiplicando pasando pedidos para hacer carbón, ladrillos, cosechar uvas o trabajar en alguna industria.
Tanto la demanda creciente de mano de obra argentina como la variedad de empleos temporarios ofrecidos, lo detectó el diputado provincial Cristian Castro. Fue porque en San Javier, su ciudad natal, comenzó a recibir a vecinos que solicitaban hacer los antecedentes penales, que es justamente uno de los requisitos exigidos para cruzar a trabajar en Brasil. “Ahí empecé a preguntar adónde se iban”, recordó Castro. Por ello, compartió que parten para la cosecha de manzanas en la zona de Vacaria (Rio Grande do Sul), a unos 500 kilómetros de San Javier y -a similar distancia- a Caxias do Sul, donde cosechan uvas, van también algunos trabajadores de El Soberbio.
Los requisitos
Entre los requisitos que debe tener y completar el obrero interesado se encuentran el CPF (lo que sería el CUIL argentino), certificado de antecedentes, fotocopia de partida de nacimiento y de DNI, entre otros. “Siempre hacía tres o cuatro trámites de antecedentes penales nacionales por semana y la semana antepasada hice 20 trámites, la semana pasada 25 trámites y esta semana en tres días 18 trámites y tengo ya otros cinco pedidos”, acotó Castro, planteando hace como mínimo 20 trámites semanales.
El crecimiento de trabajadores que desean realizar changas, aumentó tanto que en Porto Xavier –frente a San Javier, cruzando el río Uruguay-, se daban 10 turnos por día para hacer los trámites y ahora debieron subir a 15 turnos por día ante la alta demanda. Es sólo uno de los lugares y zonas por donde cruzan los obreros a Brasil.
Si bien Castro reconoce que este fenómeno no es nuevo en la región y “siempre había” trabajadores golondrina cruzando la frontera, lo hacían “entre tres y cinco por semana”, pero ahora se intensificó mucho. “Me cuentan que están yendo por semana entre 45 y 60 trabajadores a bordo de uno o dos colectivos”, acotó.
Las condiciones
Los que se van a la zona de Vacaria, asumen el compromiso de trabajar de lunes a sábado de 7.30 a 12 y de 13 a 17.30. Les ofrecen un sueldo mensual de 1.630 reales (al cambio actual $383.050) con comida, alojamiento y pasaje por cuenta de la empresa. “Ellos me dicen que están sacando entre 3.000 reales (705.00 pesos) a 3.500 reales (822.500 pesos) limpios”, al acotar que le dan alojamiento y comida.
Otros de los lugares donde están yendo a hacer changas temporarias es la zona de Caxias, Gramado y Canela, correspondiente a Rio Grande do Sul, como también Horizontina, donde van a cosechar uvas o a trabajar la siderurgia.
Los que están cruzando la frontera son pobladores de San Javier, pero también de otros lugares como El Soberbio y se conoce del interés de gente de otras provincias como Corrientes y Chaco dispuestos a cruzar la frontera para hacer un trabajo temporal.
De paso Castro plantea que los interesados son en su mayoría jóvenes, hombres y mujeres y con ello, “se rompe el mito que los jóvenes no quieren trabajar, cuando se les paga bien van y trabajan”.