ALEM: Gracias Alicia Scialabba. Descansa en Paz
Cuando la huella que se deja es tan grande y profunda, el olvidar no es una opción porque siempre estará a la vista. Hoy se fue al encuentro de nuestro buen Dios una mujer que ante todo siempre creyó y le creyó a Él y quizás por eso su legado en nuestra ciudad sea de tan singulares características.
Su especialización en pediatría y la vasta carrera que llevó adelante la hizo ser la médica de, al menos, dos generaciones en una misma familia. Varios de sus pacientes ya adultos llevaban a sus hijos a atender a quien fuera su pediatra.
Esta incansable trabajadora de la salud fue una de las grandes impulsoras para que el hospital Samic local pudiera contar con un servicio de neonatología, que hoy es un ejemplo en la región y que ofrece atención a pacientes de toda la provincia, quienes optan por el servicio debido a su calidad.
Se recibió de médica en 1969 en la Universidad de Buenos Aires (UBA) y pronto inició su residencia en los hospitales de Niños, Ferroviario y en el Hospital Ricardo Gutiérrez.
El amor la trajo a Misiones y se casó con Pablo Tschirsch, por lo que trasladó su talento profesional hacia Alem, donde apenas llegada empezó a trabajar en el Centro Médico Integral (CMI) y a los 4 años de estar aquí, en 1992, desplegó todo su profesionalismo en nuestro hospital.
Su impronta de gestión quedó grabada a fuego siendo ocho años gerente asistencial y cuatro años directora ejecutiva logrando meterse en el corazón de cada personal, colega, colaborador y sobre todo en el de miles de niños que ella vio crecer.
Que en paz descanses Alicia Scialabba, desde aquí cuidaremos tu legado de que siempre el amor bregue en la atención de cada pequeño que venga a “tu” Neo. Matias Sebely