El vicegobernador recordó su labor como médico en el atentado a la Embajada de Israel
Se cumplen 31 años del atentado terrorista contra la Embajada de Israel. El vicegobernador de Misiones, Carlos Arce brindó su apoyo médico a las víctimas del coche bomba que explotó en la sede diplomática, ubicada en la Capital Federal.
Por Florencia Bueno
Cada año, el 17 de marzo se conmemora en todo el país el Día de la Memoria y la Solidaridad con las Víctimas del Atentado a la Embajada de Israel. La fecha busca ejercitar la memoria colectiva y denunciar la impunidad vigente frente a uno de los atentados más terribles que vivió el país.
El 17 de marzo de 1992 a las 14:45 horas, el brazo armado de la organización terrorista Hezbollah estrelló una camioneta Ford F-100, que era conducida por un suicida y estaba cargada con explosivos, contra el frente del edificio de la Embajada de Israel. La sede diplomática, localizada en la esquina de Arroyo y Suipacha, llevaba allí más de cuatro décadas. En cuestión de segundos se destruyó y convirtió en escombros. El atentado, además, causó daños en una iglesia católica, una escuela, un hogar de ancianos y otros inmuebles de las inmediaciones.
Dos años más tarde, el 18 de julio de 1994, el país fue víctima de un segundo atentado terrorista que hizo volar la sede de la mutual judía AMIA en el barrio de Once. Este causó 85 muertes y centenares de heridos.
A 31 años del atentado contra la embajada de Israel, el primero del terrorismo internacional, perpetrado contra Argentina, un misionero relata cómo fue ese día, su desempeño médico en la atención de víctimas y cómo recuerda la fecha cada año.
En ese entonces, Carlos Arce, actual vicegobernador de la provincia, era un joven médico que ya había hecho su residencia durante cinco años en el Hospital Fernández de la Ciudad de Buenos Aires. Ese día “era jefe de residentes”, contó.
El Hospital Fernández donde se desempeñaba, está ubicado en el barrio de Palermo, sobre la calle Cerviño. “Estaba a cinco cuadras de la Embajada”, recordó. Ese 17 marzo, de hace 31 años, minutos antes del cambio de guardia que hacían a las 15:00hs sonó el teléfono con el aviso de que hubo un accidente. A partir de entonces, lo que debía ser un momento de regreso a casa, después de una ardua jornada de trabajo médico, “todo se volvió traumático”, expresó el vicegobernador.
“El 99% de las personas que sufrieron consecuencias por el atentado, ingresaron al hospital”, señaló. Ese día a pesar de la cercanía “no sentí ningún ruido, el Fernández es muy grande”, contó.
Llegan los primeros heridos por el coche bomba
“Nos llaman de la guardia para avisar que hubo un accidente. Con esa incertidumbre. Ese accidente incluía a chicos de un jardín de infantes. Bajamos todos los residentes a la guardia. El Fernández tiene uno de los mejores centros de emergentología del país, se había inaugurado justo una semana antes. Cuando bajamos veo un taxi con chiquitos de entre cinco y ocho años, todos blancos llenos de cemento portland, veo como 5 chicos que descienden del auto”, detalló Arce sobre el momento en que comenzaron a llegar los afectados al hospital.
El examen triage realizado a esos primeros niños en llegar fue positivo. “No tenían nada”, contó aliviado el doctor. El triage clasifica a los pacientes de acuerdo a la emergencia, en categoría urgente, no tan urgente, medianamente urgente. Debido a que los chiquitos estaban recubiertos de cemento, “les fuimos sacando con un soplete y viendo si tenían heridas”, contó.
En el atentado a la Embajada de Israel murieron 22 personas, entre israelíes y argentinos. Nueve empleados y funcionarios de la Embajada, tres albañiles y dos plomeros, un taxista y tres peatones, un sacerdote de una iglesia vecina y tres ancianos alojados en una residencia a pocos metros. Resultaron heridas otras 242 personas.
“Después de ese taxi comenzó a llegar gente en autos particulares, en taxis, en remis, en ambulancias, llegaban cientos de personas”, continuó Arce.
Detalló la importancia del trabajo médico en equipo sobre todo en situaciones límites, como la que se presentó ese día en su vida. “El jefe de emergencia clasificaba los heridos y nosotros atendíamos”, puntualizó.
Memoria: “como si fuera hoy”
El atentado a la sede diplomática de Israel representa uno de los peores ataques terroristas de la historia Argentina. “En el momento del atentado y la llegada de heridos, no sabía lo que había pasado. Cuando supe lo que sucedió sentí bronca. Porque lo que uno se imagina es que hubo un derrumbe, un escape de gas. Y después me entero que fue una camioneta llena de explosivos. Y te da bronca porque vi morir gente, personas que ya llegaron sin vida, fue muy traumático para todos”, expresó con pesar el médico misionero.
Al mismo tiempo, recordó que atendió dos heridos que le marcaron hondo los hechos de aquel 17 de marzo de 1992. “Me tocó atender dos pacientes, que recuerdo como si fuera hoy. Una señora que tenía un hemotórax, que se ve que había sufrido un aplastamiento. Cuando la veo tenia signos vitales malos, le derivo directo a quirófano y se me muere a mí en la camilla llevándola. La empezamos a reanimar, pero no hubo caso”, se lamentó.
“Y el otro chico que me marcó, fue uno que iba caminando por debajo de un edificio cercano al lugar de la explosión. La onda expansiva fue de 400/500 metros, una cosa impresionante. Y a este chico le cae mampostería y le corta totalmente el brazo. Lo primero que haces en ese momento es detener la hemorragia, conseguir el brazo todo un tema, se consiguió pero no prendió. Ese chico debe tener hoy 50/60 años y debe tener una prótesis”, señaló con pesar. Agregó que “después seguimos atendiendo gente con excoriaciones leves la mayoría”.
En la Capital Federal, las sirenas de las ambulancias no paraban de sonar. La esquina de Arroyo al 916 ahora parecía el resultado de una batalla campal sin precedente. El Hospital Fernández habilitó once quirófanos para atender heridos y en pocas horas completó su capacidad de camas.
En este sentido, Carlos Arce recuerda que a los heridos se sumaron los familiares a los que “empezamos a derivar a clínicas, porque ya el Fernández no tenía capacidad para internar o atender. La gente estaba muy aturdida”.
Hay un antes y un después de este atentado
“Cada 17 de marzo recuerdo esa situación y me vuelve a dar bronca”, manifestó el médico. Contó que el “olor que recuerdo de ese día es el de una construcción, olor a cemento fresco”. Sobre cómo se sigue luego de una tragedia como el atentado a la Embajada de Israel, dijo: “en lo agudo no dormís. Es como que tenes una excitación. Si hoy veo mucha gente llegar al Hospital, lo primero que pienso es en un atentado, te quedas con eso, con la idea de que pasó algo”.
Señaló además, cómo situaciones traumáticas marcan a las personas. Realidades como la vivida aquel 17 de marzo del ´92 dejan una alerta. “Le puede pasar a cualquiera, como en este caso que había gente caminando por la calle y sufrió heridas, como este chico que perdió el brazo”, observó.
Dentro de toda la tragedia, señaló que cada alta de pacientes es una batalla ganada. “Se internaron entre 40 y 50 pacientes. A las 24/48 horas veíamos la evolución. Sobre todo en los nenitos, teníamos internación de pediatría, y ver la desesperación de esos padres te parte el alma” dijo. Aunque, señalo que “por suerte no hubo casos de gravedad en niños, a pesar de que el Jardín de Infantes estaba a una o dos casas de la Embajada”.
A 31 años, el atentado sigue impune
Después de 31 años del atentado terrorista que destruyó la sede de la Embajada Israelí en Buenos Aires, la investigación sigue abierta en la Justicia Argentina. Aún no se logró detener a ningún sospechoso, pese a dos órdenes de captura internacional todavía vigentes.
La Corte Suprema de Justicia tiene a cargo la investigación por ser de su competencia, ya que se trató de un ataque a una sede diplomática extranjera. La justicia dio por probado cómo ocurrieron los hechos y la responsabilidad del movimiento fundamentalista islámico Hezbollah. Al mismo tiempo, un informe de la Mossad –el servicio secreto de Israel-, publicado el año pasado, ratifica la responsabilidad política y criminal de Irán y Hezbollah.
Desde 2015 está ordenada la captura internacional de uno de los acusados, el ciudadano libanés Hussein Mohamad Ibrahim Suleiman, de 62 años, con circular roja de Interpol vigente.
También se libró orden de captura para el ciudadano colombiano Samuel Salman El Reda, vigente en Interpol, pero sin resultados a la fecha. La Corte, en este sentido, reafirmó que la causa seguirá abierta por haber órdenes de captura internacional emitidas.
“Y encima cuando uno lee las noticias, no fue todavía clarificado el hecho. Los culpables se saben, pero la justicia no fue eficaz en determinar. Sigue siendo un gris. La justicia fue un gris en este hecho. Y me imagino los familiares, los amigos de la gente que falleció, debe tener mucha bronca” ,expresó Arce, quién vivió uno de los momentos más tristes de la historia del país y asistió a las victimas del hecho.
Homenaje en Misiones a las víctimas del atentado a la Embajada de Israel
El viernes17 de marzo bajó el lema “Sembrando un legado de memoria, para cosechar un futuro de paz”, se realizará el acto central en conmemoración a las víctimas del atentado a la Embajada Israelí, en Posadas.
A partir de las 10.30 en la plazoleta Estado de Israel, ubicada sobre la avenida Roque Pérez y Rivadavia se rendirá homenaje a las víctimas, a sus familiares y seres queridos; a los sobrevivientes; a todos aquellos que brindaron su apoyo y dedicación para ayudar a remover los escombros, a curar las heridas, a reconstruir lesiones del cuerpo y del alma, a reparar paredes y proyectos, indica la invitación del Cónsul Honorario de Israel para el Nordeste argentino (NEA), Mauricio Yankelevich.
Fuentes: Canal12Misiones.